Casi siempre escribo como pienso y eso me lleva a romper, con frecuencia, la estricta regla periodística del qué, cuándo y cómo. Dicho lo anterior y antes de contarles de esta nueva entrega, quiero compartirles un par de reflexiones: Kris Goyri es un joven y talentoso diseñador mexicano que sí se acuerda de la moda nupcial. Y la otra: pocas veces siento nostalgia por no estar en un lugar (en el entendido de que tengo la fortuna de que generalmente estoy donde quiero y debo) y así me pasó esta vez con su desfile. Por lo que vi, ¡estuvo realmente hermoso!

Pero retomemos lo importante: el originario de la ciudad de México se sentó a crear con calma, ¨desde lo esencial, desde el deseo de trabajar con la materia en libertad: como quien dibuja en acuarela sobre un lienzo en blanco, como quien moldea porcelana con las manos abiertas¨, y nos regala La Boda, su nueva colección para bodas.

A decir del diseñador, cada prenda está construida a través de procesos artesanales y de alta costura. Los plisados están realizados a mano en su taller, para dar vida a pétalos en movimiento y a flores que parecen bailar.

Entre las telas, destacan chiffones, crepes de seda, organzas y tulles, que generan un movimiento tan natural que se asemeja a la respiración.

El wow factor está, entre otras cosas, en que algunas de las prendas están intervenidas con pequeñas piezas de cerámica con motivos florales hechas por el escultor Juan Villavicencio.

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