Si vas a Perú, además de comer delicioso, tienes que ir a Machupicchu. Pero este país andino es mucho más: hay tres regiones que debes poner en tu lista si vuelas al sur.

1. El puente Q’eswachaka

Si le tienes miedo a las alturas, más vale que te prepares, pero por nada del mundo te lo pierdas. Esta joya arquitectónica que se alza sobre el río Apurímac a 3.700 metros sobre el nivel del mar. Son 28 metros de emoción en poco más de un metro de ancho y una vista espectacular.

Este fue construido por los incas y se mantiene en pie gracias a las comunidades de Chocayhua, Chaupibanda, Huinchiri y Collana. Una buena fecha para ir es en la segunda semana de junio, pues se realiza un festival digno de admirarse. Las mujeres de las comunidades trenzan el ichu para reconstruir el puente, mientras los hombres reemplazan las cuerdas rotas.

Si quieres llegar a esta maravilla, debes saber que está en la provincia de Canas, a 180 km al sur de Cusco.

2. Andahuaylillas: la “Capilla Sixtina” peruana en los Andes

Una fachada modesta que hace que el factor sorpresa sea aún mayor. El interior es sorprendente. Se levanta en el corazón de la provincia de Quispicanchi y es la iglesia de San Pedro Apóstol de 1626.

Su fachada es renacentista y el interior, de estilo barroco. Forma parte de la reconocida ruta barroco-andina, junto con los templos de la Compañía de Jesús, San Juan Bautista de Huaro y la Capilla de la Virgen Purificada de Canincunca -que también ameritan una visita-.

Llegar es fácil: toma un autobús en la Plaza de Armas del Cusco y en 45 minutos estarás en el lugar.

3. Pikillaqta

Se trata de una ciudad construida por la Cultura Wari a finales del siglo VI. Presume 700 edificaciones que incluyen recintos, colcas (almacenes para alimentos) y templos. Además de su función residencial -se dice que fue el hogar de 10 mil personas-, Pikillaqta sirvió como centro de culto y administrativo, ejerciendo control militar sobre el valle de Quispicanchi gracias a su ubicación estratégica.

Está a solo 30 km al sur de la ciudad de Cusco, muy cerca del pueblo de Huacarpay.

Así que ya sabes: además de Machupicchu, ten en cuenta estos tres tesoros repletos de historia y encanto.

Un par de tips extras

Con respecto al clima, puedes visitar Cusco en cualquier mes del año, pero recuerda que es época de lluvias de diciembre a abril. Para una mejor experiencia, no dudes en contratar los servicios de un tour operador.

Cusco está por encima de los 3.200 metros sobre el nivel del mar, por lo que debes ser precavido ante el mal de altura o soroche. Una buena medida es descansar el primer día, además de tomar mate de coca.